El Habito de las microdosis en Silicon Valley ¿ realmente afecta la productividad?
Ningún estudio existente ha analizado la ciencia detrás de la relacion de las microdosis y la productividad, un vacío que un equipo de científicos y apasionados recaudadores de fondos esperan llenar.
Según Amanda Feilding, una décima parte de lo que se considera una dosis completa de LSD es suficiente para hacerla sentir “brillante”.
Como fundadora y directora de la Fundación Beckley, una organización sin fines de lucro con sede en el Reino Unido, Feilding ha pasado décadas colaborando con científicos de todo el mundo para comprender mejor cómo las drogas psicodélicas como el LSD, la ayahuasca y los hongos mágicos afectan al cerebro.
Feilding dijo a Business Insider que experimentó con microdosis, o tomar pequeñas dosis de psicodélicos, en la década de 1960 como un intento de aumentar su creatividad y productividad, lo que ella llama “brillo”. Casi 60 años después, esta práctica se ha convertido en el hábito de drogas ilegales favorito de Silicon Valley, y ingenieros, programadores, escritores y artistas comparten sus historias sobre las microdosis.
Mucha gente dice que la práctica mejora su concentración o creatividad; otros, como la escritora Ayelet Waldman, que compartió su historia con el New York Times, han recurrido al régimen como una forma de tratar los síntomas de enfermedades mentales como la depresión y la ansiedad.
Pero ningún estudio existente ha analizado la ciencia detrás de las microdosis, un vacío que Feilding y un equipo de científicos y apasionados recaudadores de fondos esperan llenar.
El nuevo estudio de Feilding comenzará a finales de este año y analizará a 20 participantes en el transcurso de cuatro “días de estudio”. Cada día, los voluntarios del estudio recibirán una de las cuatro dosis posibles de LSD (0, 10, 20 o 50 microgramos) y luego realizarán una serie de tareas, responderán cuestionarios y les escanearán el cerebro. Cada prueba está diseñada para ver si las drogas afectan las capacidades creativas y cognitivas de las personas y cómo. Los investigadores también esperan saber si las microdosis afectan la comunicación dentro y entre las redes cerebrales de la misma manera que se ha descubierto que lo hace una dosis completa de psicodélicos.
“Queremos ver si vemos esos cambios en la circulación cerebral y la conectividad y, con suerte, también cosas como el momento ‘¡ajá!’ que viene con la creatividad”, dice Feilding, y agrega que esperan ver los resultados tan pronto como el año pasado. fin de año.
Para el estudio, Feilding colaborará con el psicofarmacólogo del London Imperial College, David Nutt. Los investigadores de la Universidad de Nueva York Stephen Ross y Michael Bogenshutz también participan en una serie de ensayos relacionados que actualmente aún se encuentran en fases preliminares.
Lo que necesitas saber sobre la microdosificación
La investigación existente sobre los psicodélicos ha sido prometedora hasta ahora, pero aún se encuentra en sus primeras etapas. La mayoría de los estudios se centran en el “tratamiento para el viaje”: esencialmente, darle a alguien una dosis “completa” de psicodélicos para que viaje o alucine. Los pacientes de estos estudios han dicho que la experiencia fue abrumadoramente positiva; muchos describen el viaje como una de las experiencias más importantes de sus vidas.
La microdosis psicodélica se diferencia de un “tratamiento de viaje” en que implica tomar pequeñas cantidades de una droga psicodélica varias veces durante unos pocos días, en lugar de una única dosis completa. Mientras que a los participantes se les inyectaron 75 microgramos de LSD en un estudio, por ejemplo, las microdosis informan que tomaron alrededor de 10 microgramos, o aproximadamente entre un quinto y un décimo de una dosis recreativa estándar, una vez cada cuatro días.
Estos niveles pretenden ser “subperceptivos”, explica a Business Insider el psiquiatra de la Universidad de Nueva York, Stephen Ross. En otras palabras, son demasiado pequeños para provocar un viaje, pero lo suficientemente grandes como para afectar potencialmente el pensamiento y la creatividad.